Modelo
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La historia de la Casa de Acogida Cocon (anteriormente conocida como «4. casa de acogida autónoma de mujeres») comenzó en el otoño de 1989. Un grupo de cinco mujeres de la parte este (del sector oriental) de Berlín se unió en una asociación creada específicamente con el propósito de sensibilizar sobre la violencia contra las mujeres y los/as niños/as en la RDA y abrir una casa de acogida. Este refugio debía proporcionar protección, asesoramiento y apoyo a mujeres y niños/as afectados/as por la violencia. La Casa de Acogida comenzó su labor en 1992.
Desde entonces, trabajamos contra la violencia hacia las mujeres. Nuestra labor en el refugio para mujeres abarca, principalmente, la violencia de género en cualquier tipo de entorno social. Mujeres provenientes de diversas estructuras sociales se ven afectadas por la violencia patriarcal. La violencia contra las mujeres siempre está enraizada en relaciones de poder sociales y estructurales que perjudican a las mujeres y fomentan su dependencia. Por lo tanto, consideramos que la violencia contra las mujeres no es solo un problema individual, sino un problema de toda la sociedad. Los/as niños/as se ven siempre afectados por la violencia. A ellos/as les proporcionamos espacios para sus necesidades individuales. El bienestar de los/as niños/as está siempre en el foco de nuestra labor.
En el marco de nuestro trabajo con las residentes, seguimos un enfoque de empoderamiento para que las mujeres encuentren su fuerza y se liberen de relaciones violentas. En base a sus recursos, las apoyamos para que desarrollen y sigan perspectivas seguras y libres de violencia para ellas y sus hijos/as. Nos posicionamos como mediadoras e intermediarias de conocimiento sobre derechos y acceso a sistemas de apoyo, con el fin de que las usuarias tomen decisiones informadas y con autodeterminación.
A través de diversos grupos de trabajo, trabajamos activamente para agilizar los procedimientos burocráticos a mujeres y niños/as afectados/as por la violencia y para influir políticamente en sus realidades de vida y fortalecer sus derechos.
Entendemos que nuestra sociedad está atravesada por estructuras discriminatorias como la violencia patriarcal, el sexismo, la homofobia, la transfobia, el racismo, el clasismo, el capacitismo y discriminación por edad. Por lo tanto, consideramos que es nuestra tarea reflexionar sobre la discriminación dentro del trabajo en la casa de acogida desde una perspectiva interseccional.
En nuestra casa de acogida apoyamos un ambiente sensible a la discriminación. Nuestra actuación contra la violencia doméstica y de género, a la que enfrentamos en los planos individual y estructural, la entendemos como nuestro trabajo político.
Exigimos la implementación obligatoria de las normas legales de la Convención de Estambul. El Tratado es un acuerdo internacional del Consejo de Europa para prevenir y combatir la violencia contra las mujeres y la violencia doméstica. Asimismo, los tribunales alemanes deben garantizar que los incidentes de violencia dentro de las parejas sean tomados en consideración en la toma de decisiones sobre derechos de custodia y visitas (Artículo 31). Como parte contratante, Alemania se compromete, entre otras cosas, a proporcionar suficientes lugares de protección (Artículo 23) y a prevenir la violencia de género mediante educación y campañas (Artículo 14, párrafo 1).
Para nosotras, el término «mujer» incluye a todas aquellas personas que se identifican como mujeres, independientemente del género asignado al nacer.